trastornos-alimenticios

TRASTORNOS DE ALIMENTACIÓN

Actualmente, la preocupación por el aspecto físico y el peso es muy frecuente. Nuestra sociedad enfatiza la delgadez como uno de los más importantes criterios de belleza. Esto nos ha llevado a que incluso personas con un peso normal hagan dieta para adelgazar. Como consecuencia de todo esto, trastornos de la alimentación como la anorexia nerviosa y la bulimia tienen cada vez una mayor prevalencia en la población.

 

Anorexia nerviosa:

Es un trastorno grave de la conducta alimentaria. La persona que la padece presenta un peso inferior al que sería de esperar por su edad, sexo y altura. El peso se pierde mediante el ayuno o una reducción extremada de la comida.

Se caracteriza por: miedo intenso a ganar peso, incluso estando por debajo del peso normal, distorsión de la imagen corporal, amenorrea o ausencia de tres ciclos menstruales consecutivos y exageración de la importancia del peso o de la silueta corporal en la autoevaluación.

 

Bulimia nerviosa:

Es un trastorno severo de la conducta alimentaria. La persona que la padece presenta habitualmente episodios de voracidad, tras los cuales se provoca el vómito para prevenir el aumento de peso. Va acompañada de un miedo enfermizo a engordar.

Los “atracones” se caracterizan tanto por la ingesta de grandes cantidades de comida en un corto espacio de tiempo como por la sensación de descontrol.

Se clasifica en dos subtipos:

  • Purgativo: vómito autoinducido, abuso de laxantes y diuréticos.
  • No purgativo: uso de otras conductas compensatorias no purgativas como el ejercicio extenuante o el ayuno.

 

Trastorno de sobreingesta o comer compulsivo:

La persona que la padece no puede controlar el consumo de alimentos, ingiriendo una gran cantidad de comida en un período discreto de tiempo.

Posteriormente no realiza maniobras para reducir los efectos de la sobreingesta, si bien, aparecen sentimientos de culpabilidad.

 

Señales de alarma:

  • Ayunar o saltarse comidas.
  • Demasiados alimentos “prohibidos”.
  • Pesarse cada día, mirarse muy a menudo en el espejo o preguntar a los demás insistentemente cómo le ven.
  • Sesiones extenuantes de ejercicio físico.
  • Manipulaciones o engaños para que la familia no se entere de lo que comemos.
  • Comprar, almacenar, esconder o comer en solitario alimentos.
  • Distanciamiento en las relaciones sociales y problemas familiares.
  • Mayor irritabilidad y altibajos emocionales (tristeza, llanto).
  • Comprobar continuamente las calorías que contienen los alimentos o las que hemos consumido.

 

Tratamiento:

Si consideras que puedes estar desarrollando un problema de alimentación o ya sufres las consecuencias del mismo, ha llegado el momento de actuar.

Un diagnóstico precoz, una adecuada evaluación y un programa de intervención psicológica en colaboración con otros profesionales (psiquiatra, endocrino, etc.) te proporcionarán las estrategias necesarias para solucionar el problema.

En PSB clinic nuestro equipo de psicoterapeutas diseñará un tratamiento especializado para superar con éxito el trastorno de alimentación y te proporcionará, y si lo deseas también a tu familia, una serie de pautas para enfrentar de forma correcta la situación y superar el problema.

Pide una cita

Praesent eget tortor aliquam, laoreet dui gravida, varius erat. Aliquam eget enim eu purus cursus vestibulum eu non arcu lorem.

Enviar